La nueva Miss Dior es como un “millefiori” olfativo.
La rosa centifolia, con notas melosas y picantes, reina sobre un corazón aterciopelado con una untuosidad deliciosa.
Se adorna de notas de muguete fresco, un acorde de peonía con nota de albaricoque y notas de iris empolvado.
Miss Dior se construye así alrededor de una profusión llamativa y elegante, parecida a un “millefiori” imaginado como mil flores en miles de colores.
En el fondo, los toques de maderas tiernas envuelven la composición.
En el corazón de esta profusión de flores, la rosa de Grasse. De Catherine Dior a nuestros días, es sinónimo de una promesa de felicidad y de renovación, tanto por la región que la ve nacer como por las mujeres que la cultivan. Una cadena de solidaridad que debe perdurar.